Viajar a México posiblemente no sea algo que llame la atención a muchos. Los acontecimientos de los últimos años respecto a la violencia y el mal gobierno asustan no solamente a quienes nacimos en ese país y ahora vivimos en Estados Unidos, sino al turismo en General. Viajar a México por carretera quizás sea algo impensable, pero no todo es malo y tampoco es una mala experiencia si antes de hacer el viaje investigas lo más posible.
Desde el momento que dejamos nuestro país para venir a este nuestro segundo hogar, lo hicimos precisamente manejando. Hemos regresado de vacaciones en múltiples veces, y de alguna manera podemos decir que aunque no somos expertos, si tenemos experiencia sobre el tema. Si alguna vez te has preguntado qué sería visitar a uno de los vecinos más próximos de Estados Unidos por carretera, si tienes ganas de hacerlo o si conoces a alguien a quién le gustaría la experiencia, esta información te va a interesar.
1. Para entrar a México necesitarás un permiso de importación temporal de vehículo. Este permiso puede ser solicitado en la página de internet de Banjército, y para él necesitas una tarjeta de crédito y ser residente legal en Estados Unidos. Dicho permiso se tramita de manera rápida aunque hay que tramitarlo con tiempo, necesitas tus datos personales, del vehículo y las fechas en las cuales tienes pensado estar en México. El permiso es enviado a tu domicilio a través del servicio de mensajería para el cual debes firmar al recibirlo. Además del cobro de dicho permiso, se necesita dejar un depósito en garantía, el cual garantiza a las autoridades que no vas con intención de vender dicho vehículo sin pagar los impuestos correspondientes. Dicho depósito te será regresado una vez que dejes el país. Este permiso puedes incluso tramitarlo al ingresar a México cerca de la frontera, pero te recomiendo lo hagas por internet para evitarte filas innecesarias en las cuales puedes llegar a tardarte hasta 4 horas, además de que ahí, el pago casi siempre es en efectivo.
2. Necesitas un seguro de automóvil. El seguro con el que tienes cubierto a tu vehículo en los Estados Unidos NO TE CUBRE estando en México en caso de un accidente o robo, hay que contratar un seguro específicamente para tu estancia en el país. El costo del mismo depende de los días que estarás de vacaciones y la cobertura que desees. Este también puede ser tramitado en Internet, o antes de cruzar la frontera.
3. La moneda Mexicana es el peso. Aunque cerca de la frontera y en muchos puntos turísticos es posible pagar con dólares, lo mejor es cambiar los mismos por pesos para hacer rendir mejor tu dinero y evitar el que no se te den los cambios al pagar algún bien o servicio. Actualmente por 1 dólar US te dan poco más de $16 pesos. Al cruzar la frontera encontrarás casas de cambio donde puedes cambiar tus dólares, puedes utilizar las mismas o esperar llegar a una ciudad donde puedes retirar de un cajero automático. Otra opción para disposición de efectivo la encontrarás al hacer compras en establecimientos como Oxxo, Walmart o Farmacias Guadalajara, donde al hacer tu pago tienes la opción de retirar dinero en efectivo. Cada tienda tiene un límite establecido, y para una emergencia, es buena opción.
4. Es posible que te toque revisión al cruzar la frontera. Una vez que cruces la frontera y estés en lado Méxicano, toca el paso por aduanas donde se tiene un semáforo que te indicara si puedes seguir adelante (verde) o debes detenerte (rojo). Aunque la mayoría de las veces te detienes un poco para contestar preguntas y mostrar identificaciones, y en algunos casos se te hará revisión del vehículo. Además de que también se verifica que cuentes con el permiso para el vehículo que estás manejando. Ocasionalmente y depende de la carretera, encontrarás a tu paso revisiones por parte de la policía federal, para lo cual puede o no ser necesario que bajes del automóvil. Asegúrate de seguir indicaciones, no dejar el auto solo y prestar atención a las revisiones.
6. Sobre las gasolineras y tiendas de conveniencia. Casi siempre, una vez que te acercas a una caseta de cuota encontrarás una gasolinera, y con ella, tiendas de conveniencia. Todas las gasolineras son de Pemex, pintadas en color verde, son inconfundibles. Las tiendas de conveniencia te ofrecen lo que cualquier otra en estados unidos: comida rápida, bebidas y baños. Para comer algo más en forma, es mejor esperar hasta el siguiente pueblo o ciudad más cercanos, no toda la comida de la calle es buena. Sólo haz paradas donde creas necesario y guíate por el número de personas que veas en ellas. A más personas, casi siempre significa que la tienda está mejor surtida. Un litro de gasolina puede costar $14 o $15 pesos (1 dólar), recuerda que un galón de gasolina (la medida al llenar el tanque en USA) se conforma de 3.78 litros.
8. Las carreteras libres. En general, las carreteras libres están en buen estado. Algunas por el tráfico constante de camiones de carga y las lluvias de la temporada pueden tener algunas averías, como los baches, que de caer en alguno, podrías ocasionar daños en tu automóvil. En lo posible es mejor manejar sobre carreteras de cuota, a menos que no tengas la opción. También puedes pedir consejos o preguntar sobre cierta carretera para conocer el estado de las mismas.
9. Disfruta el paisaje. Viajar por carretera te ofrece la gran ventaja de disfrutar y admirar cómo van cambiando los paisajes conforme avanzas en tu camino. Si vas al centro u occidente del país, por ejemplo, te tocará experimentar desde las montañas, el desierto, los valles y el bosque. Además de pasar por puentes con sus ríos y hasta admirar las ciudades y pueblos por donde vayas. En algunas ocasiones es posible bajarte del vehículo y tomar fotos.
10. Siempre es mejor viajar de día. En lo posible, evita manejar de noche. Manejar de noche no solamente es más cansado, sino menos seguro. Es mejor estar pendiente del camino y viajar cuando el sol ha salido, así como parar cuando empieza a oscurecer. Evita parar a descansar en la carretera, es mejor hacerlo en el pueblo o ciudad más cercano, aunque esto pueda implicarte dejar de manejar más temprano. La seguridad es primero.
Y si definitivamente lo tuyo no es viajar por carretera, siempre queda la opción de subirte a un avión. México cuenta con aeropuertos internacionales, incluyendo el de la Ciudad de México, Guadalajara y Puerto Vallarta, estos últimos dos en el Estado de donde soy originaria: Jalisco.