Cada año durante el día de muertos, mis papás se encargaban de llevarnos al cementerio para visitar la tumba de mis abuelitos. El tiempo se dedicaba para recordar a los que se nos habían adelantado, para limpiar el lugar y colocar algunas de las flores que habíamos llevado. Si teníamos suficiente dinero, las flores podrían ser naturales, pero la mayoría de las veces optábamos por las que eran de papel o de plástico y que adornaban una linda corona o cruz. No solamente eran más económicas, sino que durarían más sobre la tumba, porque seguramente no regresaríamos a visitarla sino hasta el próximo 2 de noviembre.
No hacíamos altares del día de muertos en casa. No nos vestíamos de calaveras ni tampoco nos pintábamos la cara. Algunas de esas cosas solamente se hacían en algunos hogares, y en el caso de los altares, en escuelas y la casa de la cultura o museos donde se hacían exhibiciones o concursos. Nuestro ritual del día de muertos era sencillo.
Las coronas de flores que comprábamos para adornar las tumbas, siempre estarán en mi memoria no solamente por los colores, sino por lo que representaban. Eran las ocasiones en las cuales podíamos hablar de la muerte sin sentir que era algo malo o trágico, aunque mi mamá se pusiera triste al recordar a sus muertos. Además, eran accesibles y duraderas, porque en ocasiones podías volver a encontrarte con dicha corona o cruz el siguiente año, cuando regresaras a hacer el mismo ritual.
Este año quise hacer una para adornar mi altar de muertos, porque si bien es cierto que no era una costumbre que tenía de chiquita, si es una que he iniciado para aprender un poco más sobre esta celebración y para enseñar a mis hijas porque a final de cuentas, forma parte de nuestra Cultura.
- 1 trozo de cartón de 5½”x18″
- 2 trozos de cartón de 5½”x5½”
- 10 flores de papel de china en diferentes colores
- 2-3 hojas de 19″x25″ de papel de china
- Pegamento blanco
- Silicón caliente
¿Cómo se hace?
Instrucciones para hacer la cruz:
6. Empieza a pegar las flores, primero las del centro, y al final las de los extremos. Utiliza el silicón caliente para esto. Asegúrate de que queden lo más centradas posible.
Al terminar, tu cruz se verá así de linda:
Puedes hacer tantas cruces como desees y de acuerdo a qué tan grande estará tu altar. Si deseas colgarlo sobre la pared, pega un pedacito de listón en la parte de atrás de tu cruz. Utiliza el mismo método para hacer coronas, dibujando círculos en las cajas de cartón.
Así se ve la corona colgada en la pared:
Si deseas, puedes pintar el cartón en lugar de forrarlo con el papel de china, aunque a mi me gusta más el papel. El chiste es que utilices los materiales con los que te sientas más cómoda y que vayan con tu decoración, de seguro se verán muy bonitas de cualquier manera.