Tengo que aceptarlo. La nostalgia hace de las suyas cada vez que de sorpresa me encuentro con ingredientes que no son tan comunes aquí en Estados Unidos, y que automáticamente me transportan a mi niñez en México. Eso mismo fue lo que pasó hace una semana que fuimos a Chicago y en un supermercado encontramos los deliciosos nopales, y esta vez, no fueron dentro de un frasco sino frescos en el área de las frutas y verduras. Y es que no hay nada mejor que encontrar los ingredientes en su estado natural, y no dentro de un frasco de vidrio o de una lata, aunque eso signifique tener que invertir…