Pensando en un dulce en particular y muy famoso (el pulparindo) que tiene ese sabor agridulce-picante, es que se me ocurrió la idea de estas paletas congeladas, porque a final de cuentas el Verano no termina(ni queremos que termine pronto) y estas paletitas son perfectas para cuando los niños regresan de la escuela, precisamente como eso, como un dulce para ellos.
Para hacerlas más atractivas es que utilicé vasitos de plástico pequeños (2 oz), pero el tamaño de ellos puede variar, dependiendo lo que más te agrade a tí. Cabe mencionar que al cambiar el tamaño del vaso, automáticamente cambiarán el número de paletas que resulten.
Paletitas congeladas de Tamarindo
Dulces y Saladas
Ingredientes :(para 18-20 paletitas de 2oz cada una)
1 libra de tamarindos
2 tazas de agua
Paletas dulces:
¼-½ taza de azúcar
1 limón (el jugo)
1½ tazas de agua
Paletas saladas/picantes:
1 cucharada de azúcar
2 cucharadas de chile en polvo con limón
1½ tazas de agua
Utensilios:
Palitos de madera
Vasitos desechables
Procedimiento:
Pela los tamarindos, colócalos en una cacerola y hierve con las dos tazas de agua a temperatura media.
Deja enfriar y usa un machucador para extraer toda la pulpa de los tamarindos.
Retira las semillas y pasa la pulpa por una coladera, al final, obtendrás 1 taza aproximadamente de pulpa de tamarindo.
Para las paletas:
Paletas dulces:
Combina ½ taza de la pulpa con el jugo de limón, agua y azúcar. Puedes usar la cantidad necesaria de acuerdo a qué tan dulce quieres las paletas. Agrega más agua si quieres que sean más ligeras.
Vierte la mezcla en vasitos de plástico.
Paletas saladas/picantes:
Combina ½ taza de la pulpa con el azúcar y el chile en polvo. Ajusta el chile en polvo (agregando más o menos). Vierte la mezcla en vasitos de plástico.
Coloca los vasitos en una charola y congela unos 10-15 minutos, entonces pon los palitos de madera en las paletas y deja congelar de 1-2 horas.
Te aseguro que estas paletas te encantarán, y si como yo, vienes de México, seguramente te traerán buenos recuerdos, y si no, te darás cuenta por qué es que nos gusta tanto este sabor.
La pulpa de tamarindo también puedes utilizarla para hacer agua fresca, lo único que tienes que hacer es aumentar en 1-2 litros la cantidad de agua, agregar hielos y ajustar el azúcar. Entre más agua agregues, más diluído estará el tamarindo, y más suave el sabor. Yo te aconsejo que dejes el agua lo más parecida al color de la pulpa de tamarindo, es cuando tiene mejor sabor.
¿cuál es tu sabor favorito de paletas congeladas?
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