Agua Fresca de Sandía

Esta es el agua de sandía más cara que me ha tocado preparar. Bueno, al menos es la sandía más cara que me ha tocado comprar. Ya sé, vivo en una zona en la que alimentos de este tipo son importados y que aparte están fuera de temporada (al menos ahora). Igual no me deja de sorprender que haya pagado 10 dólares por una sandía del tamaño de un balón. No, nadie me obligó, pero entre que la necesitaba para hacer aparición en un post (diferente a este) y que me encanta la sandía por su sabor dulce y sensación de frescura, no me pude resistir. 

Al menos tuve suerte de que saliera roja y dulce, aunque no tan firma como yo hubiera querido. Lejos están los días donde podíamos “probar” las sandías antes de comprarlas, y pagar por ellas apenas unos pesos. Bueno, obviamente no aquí en Estados Unidos, pero si allá en las calles de mi pueblo. En fin, lo mejor es disfrutar, aunque a veces uno no puede evitar quejarse, ha de ser ya nuestra naturaleza humana. Quizás sea el agua fresca de sandía más cara, pero al menos también ha sido la más dulce hasta ahorita.

Tenía miedo siquiera de tomarla en el supermercado, digo, nunca he sido buena para escoger sandías y melones, pero me fuí por la apariencia, el peso y la textura. Menos mal que corrí con suerte y la sandía no solamente tenía aspecto decente por dentro, sino que también estaba muy dulce, tan dulce, que no pude dejar de hacer esta agua fresca.

Lo mejor de todo es que a diferencia de otras aguas frescas (como la de limón) no necesitas nada de azúcar para endulzarla. Tan sólo basta la sandía y agua para prepararla y mucho hielo para servirla.

Licúa la sandía sola, si tiene demasiadas semillas trata de quitarlas antes, agrega tanta agua simple como quieras, y al servirla, usa mucho o poco hielo. Si deseas que sea aún más refrescante, no olvides agregar unas hojitas de menta o hierbabuena.

Si deseas, puedes colar la sandía después de licuarla, pero yo prefiero no hacerlo.

Definitivamente no creo que vuelva a comprar otra sandía a este precio, porque francamente se me hace exagerado, y bien pudiera aprovechar otras frutas “de estación” aunque la variedad no sea tan grande. Ganas me daban de haber comprado la sandía con seguro, de tan cara que se me hizo. Si fuera en Verano, seguramente saldría a mitad de precio, pero cuando hay antojo, uno no puede esperar tanto.

Esto es una de las desventajas de vivir en esta parte del país, no solamente las sandías, sino también los aguacates, los limones, las mandarinas y a veces hasta los chiles están súper caros. O debería decir, es la desventaja de ser Mexicana queriendo cocinar como en México viviendo por estos lados. Pero bueno, no se puede tener todo, o al menos no todo el tiempo.

Con la sandía que compre, hemos tenido suficiente para preparar el agua, mandar en la comida de mi esposo y disfrutar del resto como refrigerio en casa. Como buena Mexicana, no puede faltar la fruta picada con chile en polvo.

Si compras sandía, es mejor que la utilices dentro de la primera semana en que la compras, es de las frutas que no duran mucho tiempo, y aparte, ¿quién va a querer tener simplemente guardada una sandía cuando se la puede estar comiendo? Y más aún, cuando ha costado tan cara.

¡Que disfrutes de esta agua de sandía!

¿te parece exagerado el precio de algunas frutas?